Ha muerto José Luis Sampedro, un sabio de esos que se cuentan con el dedo de una mano, que decía aquel. De los que de verdad encajan en la definición de maestro, una palabra depreciada muchas veces. No estoy a la altura para hacerle un homenaje con mis propias palabras. El mejor homenaje es pararse un momento a escuchar las suyas, a aprender y a pensar por nosotros mismos.
Que la tierra le sea leve, maestro.